Comentaba hoy a mi pancetilla, si merece la pena continuar escribiendo en el Odeón de Protion. Yo lo llamo el efecto Seinfeld: muchos años escribiendo sobre la nada termina por ser agotador. Y no me refiero a agotamiento mental en este nuestro caso, si no agotamiento de la fórmula.
Cuando empecé el Odeón de Protion en la plataforma Windows live spaces, allá por el 2004, la verdad es que tenía muchísimo más tiempo libre del que dispongo ahora. También se daba el caso de que tenía muchas más ideas en la cabeza y podía por lo tanto actualizar el blog más a menudo. El tiempo va pasando, y todo cambia tarde o temprano.
Esta entrada no significa para nada que vaya a abandonar el blog, ni siquiera que se trate de un largo descanso. Simplemente es una pequeña reflexión. A lo largo de mi vida he tenido muchos proyectos en Internet: la vieja protion9 en Geocities, Los hijos de Aiur, La Nueva Iglesia Cristiana de la Santa Luz y como no, La Taberna del Estrofio, la verdadera semilla de este blog. Y no solo eso, también tenía mis cuentos, mis películas y mi música. Muchos de esos proyectos ya duermen en el baúl de los recuerdos, otros siguen pareciéndome divertidos después de ya muchos años.
Quizá sea hora de fusionar algunos de esos proyectos con el Odeón de Protion. Veremos…
1 comentario:
¿quien es esta dulzura?
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