¡Ay no, una rata!

No hay que ser muy lince para darse cuenta de que el peor enemigo del hombre y el caniche es... la rata.

Verminator, el rey de las ratas, jeje, ¡el rey de las ratas!

La rata de suelo (no confundir con el animal comúnmente llamado paloma) es uno de los mamíferos más temidos que pueblan la faz de la tierra. Diversas fuentes del todo fiables han visto como estos temibles animales son capaz de saltar a la altura de un primer piso y robar joyeros y demás objetos valiosos, o como en Michigan, una mujer aseguró ver como varias ratas desvalijaban su piso y se llevaban la tarima flotante para adecentar sus nidos.

Si una rata se te queda mirando, lo mejor que puedes intentar es a hacerte el muerto, aunque sea en medio de la calle. Nos cuenta Timmy Swarski desde Ohio, que un día estaba paseando tranquilamente por la ribera del arroyo de su pueblo, cuando de repente de entre las piedras salió uno de estos terribles roedores y le cortó el paso. Aterrado, Timmy no pudo mantenerse en pie y cayó de bruces contra el suelo. Esta muestra de cobardía e indecencia, que muestra lo peor de nuestra especie, sin embargo, fue lo que logró mantenerle vivo. Según nos cuenta Timmy, la rata se acercó a él, le lamió detrás de la oreja en busca de piel muerta y siguió su camino de muerte y devastación.

No tuvo la misma suerte nuestra amiga Cindy, de Arkansas. Nos cuenta desde el hospital, que estaba aseándose sus partes más deliciosas en el bidé cuando oyó un chillido que venía de entre las paredes de su baño. Si Cindy hubiese sido más precavida ahora mismo no estaría llorando la pérdida de un equipo de sonido valorado en más de mil dólares y las tres operaciones de injertos de piel en el gluteo izquierdo.

Así que recordad mis queridos lectores: no nos hagamos los valientes, no tenemos nada que demostrar. Ellas son más, son fuertes y están cabreadas.