viernes, octubre 23, 2009

Niño fácilmente impresionable se impresiona

Ahhh la curiosidad, esa gran virtud. Estaba yo tan tranquilo navegando por la ancha red mundial cuando de repente sentí un escalofrío en mi nuca. Era mi tortuga resoplándome. Después de unos minutos de gran shock y de profunda conmoción, volví a mis quehaceres diarios de imbestigación digital.
Figura 1. Al igual que los modelos de Opera, mi nivel de hombre atractivo subió un 10% desde que lo uso.

Y fue así como que no quiere la cosa, que me di cuenta de que podía probar una cosa en mi navegador Opera, ese que solo usamos la gente atractiva: si ocultamos la barra de menús, ganamos unos valiosos píxeles de pantalla, pero por desgracia, perdería la posibilidad de acceder a los marcadores de la forma más rápida posible. Así que me acordé de la barra de inicio de Opera, esa barrita que te permite acceder a marcadores, las 10 primeras direcciones y demás historias. Llegar a marcadores significaría con este método tener que dar dos clics. Esto es demasiado para mi en términos de usabilidad, aunque la idea en si no es mala.

Figura 2. La idea en si no es mala, pero puede ser mejor para lo que yo necesitaba. Por suerte consultando la web de la Iglesia de la Luz, llegué a la solución perfecta.

Y llegué a la solución final (no, no tuvo que morir ningún judío). Añadir un bonito botón a la barra de direcciones que me da acceso directo a los marcadores. Y así de un solo clic, puedo desplegar la lista y navegar en ella. Y también, al igual que antes, de dos clic puedo acceder a las opciones y a las herramientas pero esta vez con la ventaja de haber ganado esos pixeles. Al fin puedo tener la disposición de las barras de Internet explorer, que tanto me gustan pero en Opera. Lo triste es que esta opción ya venía por defecto en la 9.5 y no me enteré.


Figura 3. Ah, las interfaces limpias, que delicia.

2 comentarios:

Juanito dijo...

Los de Opera pretenden ser gente guapa con énfasis. A los feos no les queda más remedio que reivindicarse como atractivos enfáticamente (o resultones según el grado de fealdad). Un barroquismo útil para convertir un deficit en virtud. Al pan pan y al vino bi no… Agua.

Yo y Brad somos sencillamente guapos, como la chica de la foto demasiado blanca.

Pd.: Opera, ¿no es un quelonio en Windows?.

Protion9 dijo...

No es tan rápido como Chrome, pero en consumo de memoria y procesador le da patadas a Firefox.