Según un estudio financiado por GSMedics y Partner Flyers en 2008, lo que nosotros conocemos como cerdo agridulce ni es cerdo, ni es agridulce. Realmente el sabor adecuado para describir este tipo de alimento es aglodulcoricoloide, un sabor parecido al agridulce pero más intenso en cuanto a un nivel normal de insipidez. Mucha gente se piensa que al pedir cerdo agridulce están pidiendo la carne rebozada de ese simpático animalillo sonrosado que vive en granjas o protagoniza divertidas películas infantiles, pero están equivocados. Al igual que los palitos de cangrejo, el cerdo agridulce no es más que un sucedanio artificial inventado por los orientales para confundir al mundo occidental y civilizado.
Según los estudios indicados al principio de este artículo, la carne del cerdo agridulce tiene una textura y sabor similar a la del cerdo común (Sus scrofa domestica). Lo que hizo sospechar a los científicos no fue la carne en sí, sino el recubrimiento gelatinoso, a veces crujiente, a veces blando, que forma el alimento. Y es que esta capa orgánica contiene elevadas concentraciones de quitina, componente principal en el exoesqueleto de los insectos. Tirando del hilo, los científicos pudieron llegar a descodificar mediante radioespectro electromagnético de positrones el código genético alojado en esta viscosa capa y llegaron a una sorprendente conclusión: estábamos hablando de un tipo de insecto desconocido hasta ahora.
Finalmente, y debido a presiones de los fabricantes de cerdos, el gobierno chino dio a conocer al mundo su oscuro secreto: el cerdo agridulce era cultivado en los subterraneos de grandes granjas de cerdo. El insecto (bautizado como Naiburen scrofa) en cuestión vivía del sudor del cerdo y por ello adquiría su delicioso sabor. Al pasar a un estado de crisálida, era inmediatamente gaseado, asfixiado y congelado, manteniéndose así los segregados color naranja que le producen su sabor y obteniendo la crujiente cubierta que lo rodeaba en perfectas condiciones.
Ahora la pregunta es ¿Por qué Zapatero nos ha estado ocultando la realidad de estos hechos a la opinión pública? ¿Qué tipo de favores ha recibido de un gobierno comunista como para poner en peligro la salud de todo un país? El gobierno nos debe una explicación.
1 comentario:
José Luis y yo comemos cerdo de pata negra. Ese que campea por la piel de toro en las dehesas extremeñas de España y Portugal. Ese de pelo negro o colorao que se cruza en un polvo con su hermano jabalí. Hostiás Pedrín como sudan chavalín, y sin radioespectro.
El cerdo blanco (sonrosadito) nos resulta insípidamente europeo, chino y americano, aunque si desde chiquitín lo alimentamos con unas bellotitas o con las sobras de nuestra casita, también lo sentamos a comer en nuestra mesa.
Me suda la posha aquestos (blancos) (cerdos) que se alimentan del genuino sudor de los negros ibéricos.
Es de pública opinión. Por hacer un favor debía una explicación.
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