El arrebatamiento

Resacoso y asqueado escribo este post.

Bien, no puedo callarme más. Visito cada cierto tiempo una página evangélica. Sus creencias extrañas y estúpidas provocan mis más sonoras carcajadas. A parte de repetir uuuuuuna y oooooootra vez que el mundo mundial se va a acabar y que el galileo va a regresar de los muertos para implantar una teocracia paradisiaca o algo por el estilo en plan Marina d'or (¡Que guay!), pero con eso de que no van a dejar ni follar ni beber no parece un paraíso, así que yo no votaré a Dios en las elecciones. ¿Por cierto? ¿Se podrá votar? ¿Podrás elegir a tu santo/a preferido? ¡Vive Dios!

El caso es que ahora a estos pobres borreguillos se les ha ocurrido hacer una película sobre los últimos días de este nuestro valle de lágrimas. Conozco una del estilo que hizo uno de los protagonistas de "Los problemas crecen". Era el tipico telefilm que te echabas unas risas de lo buenos buenisimos que eran los galileos y lo malos malos que eran los ateos.

Pero es que esta nueva no tiene precio. Basicamente han cogido una camara Somy handycam y han ido grabando a "actores" (notese aquí una gran gran gran ironía) haciendo que unos (de nuevo se repite el guión) son muy muy buenos buenisimos cristianos en contraposición con los ateos maleficos. El apartado técnico del trailer brilla por su ausencia. Mis tortugas entienden más de fotografía. Los guiones son repelentes a más no poder. Los efectos especiales parecen sacados de una película de serie Z de hace un siglo. Bueno, no, no quiero criticar a esas películas de los años veinte que al menos se lo curraban. Estos simplemente utilizan el photoxop para copiar y pegar. Eso si, tiene unos increibles efectos de bolas de energía que parecerá que estás viendo Dragon ball.

Y ya no me río más de esta pobre gente, que bastante pedrada tienen en la cabeza.

Aquí os dejo la imagen de la portada de la película. Recomiendo verla con un alto nivel de estupefacientes en sangre para tomarsela lo más sarcasticamente posible. Ni me molesto en poner la dirección para darles publicidad. Y bueno, ni se os ocurra comprar la película, que os la traiga la mula.